Un estudio ha arrojado luz sobre una característica fascinante del cerebro autista: su actividad sensorial en estado de reposo. A través de la magnetoencefalografía (MEG), los investigadores descubrieron que los cerebros de las personas autistas generan una cantidad significativamente mayor de información en reposo en comparación con los cerebros no autistas. Este hallazgo nos invita a reflexionar sobre la rica vida sensorial interna de las personas autistas, hagámoslo desde una mirada respetuosa con la neurodiversidad.
Sensorialidad Amplificada: Un Mundo Vibrante
Muchas personas autistas experimentan una mayor sensibilidad a los estímulos sensoriales. Esta sensibilidad amplificada no desaparece en estado de reposo. El estudio sugiere que, incluso cuando el mundo exterior se calma, el cerebro de una persona autista continúa procesando activamente una gran cantidad de información sensorial interna.
Dificultad para Filtrar: Un Flujo Constante de Información
A diferencia de las personas no autistas, que pueden filtrar los estímulos sensoriales irrelevantes, las personas autistas a menudo tienen dificultades para suprimir esta información. Esto puede llevar a una sobrecarga sensorial, pero también a una experiencia del mundo más rica y detallada.
Implicaciones y Reflexiones
- Neurodiversidad y Experiencia Sensorial: Es crucial reconocer que esta diferencia en el procesamiento sensorial no es un déficit, sino una variación neurológica. La sensibilidad sensorial amplificada puede ser una fuente de creatividad, percepción aguda y una conexión profunda con el mundo interior.
- Comprensión y Apoyo: Comprender la experiencia sensorial de las personas autistas puede ayudarnos a crear entornos más inclusivos y respetuosos. Esto implica reducir los estímulos sensoriales abrumadores y proporcionar espacios tranquilos donde las personas autistas puedan regular su sensorialidad.
- Investigación Futura: Se necesita más investigación para explorar la relación entre la actividad sensorial en reposo y las experiencias únicas de las personas autistas. Esto podría incluir estudios sobre cómo la meditación, la terapia sensorial y otras intervenciones pueden ayudar a las personas autistas a regular su sensorialidad.
Conclusión
El estudio nos ofrece una perspectiva sobre el autismo, destacando la importancia de la sensorialidad y la rica vida interior de las personas autistas. Al adoptar una perspectiva de neurodiversidad, podemos apreciar y celebrar las diferencias en el procesamiento sensorial, y trabajar para crear un mundo más inclusivo para todos.
Estudio: Information gain in the brain's resting state: A new perspective on autism https://pmc.ncbi.nlm.nih.gov/articles/PMC3870924/ de diciembre 2013