Algunas características propias del autismo aparecen a edades muy tempranas, sin embargo todavía hoy siguen haciéndose diagnósticos de manera tardía, alrededor de los tres años o después, por falta de profesionales especializados.
Una de las maneras más eficaces de detección es sin duda, conocer los hitos del desarrollo típico en todas las áreas. A continuación mencionaremos algunos de los hitos evolutivos típico comprendidos entre el nacimiento y los 18 meses de vida:
- 3 meses: controla la cabeza, fija la mirada, realiza seguimientos visuales, aparece la sonrisa social, duerme periodos prolongados, se interesa por el entorno, responde a sonidos familiares.
- 3 a 6 meses: se ríe a carcajadas, balbucea con intención de llamar la atención y de comunicación, se orienta hacia los sonidos, tiende a tomar objetos, juega con sus pies y manos, reconoce a sus padres y familiares cercanos.
- 6 a 9 meses: extraña y llora cuando se van los padres, estira los brazos si lo van a alzar (anticipa), se sienta y se desplaza reptando, intenta pararse, aplaude, explora los juguetes, los manipula y tira para ver qué pasa, repite sonidos o sílabas sueltas.
- 9 a 12 meses: explora más objetos, busca objetos escondidos, gatea, se pone de pie con ayuda y se desplaza lateralmente, dice papá y mamá, entiende órdenes sencillas y prohibiciones, provoca la comunicación, imita sonidos y gestos.
- 12 a 18 meses: se interesa por los niños, señala y nombra objetos, conoce las partes del cuerpo, se identifica en un espejo, se interesa por los cuentos, aumenta el lenguaje y repite palabras, camina solo.
Durante esta primera etapa, puede pasar que los padres no noten grandes diferencias que los hagan pensar que el niño sea neurodivergente, ya que pueden ser señales sutiles. Será seguramente en el desarrollo de las competencias sociales y de comunicación que podrán apreciar diferencias en relación a otros niños de desarrollo neurotípico (siempre y cuando no existan otras deficiencias asociadas). Es por eso que resulta habitual que las primeras señales claras aparezcan a partir del ingreso al jardín de infantes, cuando los niños ya tienen cerca de 24 meses. En el cuadro que a continuación se presenta, se observan los hitos evolutivos típicos ente los 2 y los 4 años, etapa fundamental para el diagnóstico temprano:
En el año 2000, Wetherby y Woods identificaron de forma exhaustiva y sistemática indicadores de una diferencia en el desarrollo neurológico, durante el segundo año de vida. Dichas señales se hallan en el SORF a través de 29 ítems agrupados en las 5 siguientes áreas:
- Interacción social recíproca:
- Rechazo a la proximidad o contacto social
- Ausencia de un contacto ocular apropiado
- Ausencia de expresiones cálidas y placenteras junto con una mirada directa
- Ausencia de interés o placer compartido
- Ausencia de posturas o movimientos anticipatorios en respuesta a una interacción
- Ausencia de respuesta a las señales contextuales
- Ausencia de respuesta al nombre
- Ausencia de coordinación de la mirada con la expresión facial, los gestos y los sonidos.
- Gestos no convencionales:
- Uso de la mano de otra persona como herramienta sin mirada
directa o contacto ocular - Ausencia de gesto indicativo de señalar
- Ausencia de acciones de mostrar
- Sonidos y palabras no convencionales:
- Vocalizaciones atípicas
- Encadenamientos silábicos inusuales
- Prosodia inusual
- Ecolalia inmediata o demorada
- Uso repetitivo o idiosincrásico de palabras o frases
- Ausencia de vocalizaciones comunicativas
- Conductas repetitivas e intereses restrictivos
- Movimientos repetitivos o posturas del cuerpo con brazos, manos o dedos
- Movimientos repetitivos con objetos
- Intereses sensoriales inusuales o exploración inusual de los objetos
- Interés o focalización excesivos hacia objetos particulares
- Ausencia de juego con una variedad de juguetes y objetos
- Regulación emocional:
- Miedo o angustia a determinados objetos
- Angustia al retirar ciertos objetos
- Dificultades para calmarse cuando está angustiado
- Cambios bruscos de estado de ánimo emocional o conductual
- Nivel elevado de alerta o respuesta ante estímulos o situaciones
- Afecto plano o no reactivo a la interacción
- Conductas desafiantes
Tomado del libro"Espectro Autista, Derribando mitos, construyendo realidades" de Clelia Reboredo.